Emprendamos, pero en “verde”

¿Cuán importante es pensar en innovar y crear teniendo en cuenta los recursos naturales? En este artículo, Cristián González de la Fuente nos da algunas razones para considerar a nuestro planeta al momento de emprender.

Para nadie es un misterio que estamos en un planeta que cada vez se ve más maltratado. Como humanos, hemos generado grandes innovaciones, hemos creado tremendas obras arquitectónicas, autos de lujo que ya poco distan de los que veíamos en los Supersónicos. Hemos crecido de una manera inmedible. Bueno, podemos medirlo mediante la huella de carbono, y quizá ahí no será tan “increíble” el panorama.

En los últimos cien años, hemos contaminado a nuestro planeta más de lo que se contaminó en los pasados 1900. Nos preocupamos de crecer, pero no de cuidar; de adaptar ciudades, pero no adaptarnos a nuestro entorno: hicimos que la tierra tuviese que adaptarse a nosotros.

No quiero sonar como ambientalista, pero tal vez todos deberíamos tener un porcentaje de ese pensar en nuestra conciencia a la hora de llevar a cabo nuestro día a día. Gestos pequeños sumados, generan cambios positivos y considerables. El simple hecho de reciclar nuestras latas de bebida, botellas, preocuparnos porque lo que compramos y consumimos esté hecho de materiales sustentables, orgánicos y/o naturales, puede reversar en parte la situación por la que atraviesa nuestro querido, y único, planeta Tierra.

Emprender a conciencia es emprender responsablemente, sabiendo que todo acto tiene consecuencias, beneficios y perjuicios. Cuando se parte desde cero con un proyecto, dándole relevancia a la visión e implementación sustentable, se genera un cambio que es permanente, un valor agregado y un aporte para el planeta.

Gestos pequeños, como preocuparse de no imprimir más de la cuenta, reciclar, reutilizar materiales o preocuparse de que lo que utilizaremos y luego desecharemos, esté hecho de un material que se biodegrade, es una cuota altísima en cuanto al cambio que queremos hacer como sociedad.

Muchas veces podemos ver en las redes sociales fotos que dicen “comparte esta foto si estás en contra del calentamiento global”, “dale like a la foto si quieres salvar a los pandas”, y tantas más… La verdad es que compartiendo la foto no se salvará ni el panda ni impediremos el calentamiento global, pero si trabajamos por que así sea, si somos responsables en nuestro quehacer diario, en cómo funcionamos y en lo que consumimos, si.

Emprendamos, innovemos, creemos, pero siempre hagámoslo pensando en que tenemos que crear un impacto positivo en nuestro entorno y cuidar que así se mantenga.